El decomiso de bienes a la delincuencia y a actores que incidan en actos de corruptela, a través de la función pública, impacta de manera benéfica para reducir los índices delictivos que registra la entidad, pero también representa una plataforma de recaudación para Michoacán, consideró el diputado Fermín Bernabé Bahena. 

Bajo estos argumentos, el coordinador parlamentario de Morena celebró que en el Congreso de Michoacán hayan existido coincidencias para responder por la reforma a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia de extinción de dominio, mediante la cual se permite la confiscación de bienes adquiridos por delitos de corrupción, robo de hidrocarburos, ilícitos cometidos por servidores públicos y extorsión. 

Explicó que, “… con ello permitiremos que nuestras autoridades en procuración de justicia en representación del estado puedan apropiarse de bienes de origen o destino ilícito, partiendo de que la reforma planteada será eficaz en el combate a la delincuencia organizada mermando sus estructuras financieras y sus ganancias económicas, al recuperar los activos generados mediante dinero ilícito”. 

En este sentido, Bernabé Bahena avaló que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador vaya a subastar joyería decomisada a la delincuencia organizada para nutrir así el esquema operativo del Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado.

“Nuestro presidente de la República está poniendo el ejemplo, pues al confiscar los bienes de la delincuencia debemos generar también plataformas de recaudación que abonen al resarcimiento de la economía nacional”, enfatizó. 

En conclusión, el coordinador parlamentario de Morena resaltó la importancia de que la administración estatal en turno adopte este tipo de acciones, sin que se ignoren mecanismos de transparencia que garanticen el correcto uso de los recursos recaudados.