Con miras a la Conferencia sobre el Clima, también conocida como COP26, la Organización Mundial de la Salud (OMS) instó este lunes a los países a actuar con carácter de urgencia en la mitigación y adaptación a ese fenómeno para evitar una catástrofe sanitaria debida al calentamiento del planeta y para conseguir que la recuperación de la crisis generada por el COVID-19 sea saludable y ecológica.
En un Informe sobre cambio climático y salud elaborado para la COP26, a celebrarse en noviembre en la ciudad escocesa de Glasgow, la agencia de la ONU destaca la relación intrínseca entre clima y salud, afirmando que el personal sanitario ya atiende a muchos pacientes con daños causados por el cambio climático.
Carta gremial
Una carta que acompaña al estudio y que ostenta la firma de más de dos tercios de la fuerza laboral sanitaria mundial pide a los líderes nacionales y a las delegaciones de los países de la COP26 que intensifiquen las acciones contra el cambio climático.
“Hacemos un llamado a los líderes de todos los países y a sus representantes en la COP26 a evitar la inminente catástrofe sanitaria limitando el calentamiento global a 1,5°C y a que la salud humana y la equidad sean el centro de todas las acciones de mitigación y adaptación al cambio climático”, apuntan los más de 45 millones de médicos y trabajadores de salud que rubrican la misiva.
Los profesionales de la salud recuerdan que los cambios en el tiempo y el clima aumentan las enfermedades transmitidas por los alimentos, el agua y los vectores, como la malaria. También recalcan que el impacto de los siniestros climáticos afectan negativamente la salud mental.
Matar al planeta y a la gente
El director general de la Organización Mundial de la Salud recordó que la pandemia de COVID-19 evidenció los vínculos entre los seres humanos, los animales y el medio ambiente.
“Las mismas opciones insostenibles que están matando a nuestro planeta están matando a la gente. La OMS insta a todos los países a que en la COP 26 se comprometan a tomar medidas decisivas para limitar el calentamiento global a 1,5°C, no sólo porque es lo correcto, sino porque nos beneficia. Este informe delinea diez prioridades para salvaguardar la salud de las personas y el planeta que nos sustenta”, señaló el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus.
El estudio subraya la creciente frecuencia de fenómenos meteorológicos cada vez más extremos y enfatiza no sólo las muertes, la inseguridad alimentaria y la destrucción que conllevan, sino también el impacto que tienen en los sistemas e instalaciones sanitarias en los momentos en que más se necesitan.