Asimismo, las obras estratégicas del Gobierno de la Cuarta Transformación —Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, Tren Maya, Desarrollo del Istmo de Tehuantepec y rehabilitación de seis refinerías y construcción de la de Dos Bocas— tienen recursos etiquetados para dar continuidad a su ejecución.
El jefe del ejecutivo refrendó el compromiso de no aumentar los precios de las gasolinas, el diésel, el gas y la electricidad.
En cuanto a las participaciones federales, el presidente dijo que seguirán entregándose a los 32 estados de la República de forma puntual y conforme marca la ley.
Agregó que no se despedirá a trabajadores y el incremento a los salarios nunca más será por debajo de la inflación como sucedía en el periodo neoliberal.
Explicó que el aumento de deuda no se debe a que se hayan solicitado nuevos créditos, sino a la caída y depreciación del peso.
“Frente a la crisis económica, la aplicación de nuestra estrategia (de recuperación) fue la correcta”, enfatizó.
“Estamos seguros que en la medida que se va a ir recuperando la economía, va a ir bajando el porcentaje de deuda. El propósito es dejar la deuda pública igual que como la recibimos, considerando el Producto Interno Bruto del país”, precisó.
El mandatario sostuvo que hay indicios de que se recupera la economía de la crisis derivada de la epidemia de COVID-19. Uno de ellos, refirió, es que “ya no se están perdiendo empleos, al contrario, se están creando. El mes pasado, 90 mil nuevos empleos y en lo que va de septiembre también llevamos inscritos nuevos trabajadores al Seguro Social”.
“Estamos enfrentando con éxito, desde luego con el dolor que implica, dos crisis: la sanitaria y la económica. Tengamos fe, no perdamos la esperanza; vamos bien. Se está transformando al país”, expresó.