Como contadoras de historias, las actrices nominadas a la entrega del Ariel (el 27 de septiembre) consideran que en el cine nacional aún no se les da suficiente desarrollo a las vivencias y complejidades femeninas. Durante un encuentro virtual, este miércoles, las nominadas Mariana Treviño (Polvo), Verónica Langer (Clases de Historia), Cassandra Ciangherotti (Solteras), Edwarda Gurrola (Luciérnagas) y Giovanna Zacarías (Sonora) reflexionaron que la cinematografía mexicana está en deuda con la mujer.

“La mayoría de las historias son de hombres y siguen con el cliché de las mujeres. Cuando me llaman para ser mamá, ya me da sueño."

“Las mujeres podemos ser madres, pero pareciera que los personajes femeninos no fueran interesantes, no pudiéramos ser profesionistas o madres conflictivas. El sesgo está muy cargado todavía al lado de la mujer”, opinó Langer. Sus colegas apuntaron que su observación no vislumbra cuotas de género, pues no existe cine de mujeres, sino buen cine que las toma en cuenta.

Para Ciangherotti, los proyectos deben de incluir complejidad, como descubrió al formar parte de la película Solteras, donde aprendió a no juzgar la historia de mujeres que sueñan con casarse. “Me debato si el cine fomenta cosas o las refleja. Las mujeres tenemos que modificar la forma en que percibimos nuestras posibilidades”, dijo.